Hoy os traigo un
truco de belleza cien por cien casero: tomar vapores de romero en la cara. Yo
los hago desde toda la vida, porque mi madre me lo inculcó viéndola hacer. Y es
que es un remedio eficaz para limpiar la piel y tenerla más luminosa. Cuando
tengamos una cita importante lo podemos hacer unos días antes.
Se trata de poner
unas ramitas de romero fresco en agua hirviendo y dejar 2 minutos. Apagar el
fuego y dejar reposar otros 5 minutos. Tras esto, con una toalla, hacemos una
especie de “carpa” con ella, en la que dentro esté el recipiente con el agua
caliente de romero y nuestro rostro (ponemos el recipiente encima de una mesa,
la cara cerca de este de tal forma que nos llegue el vapor y por encima una
toalla para que no se escape el vapor). Y estamos así unos 15-20 minutos.
Luego nos
retiramos (no salir a tomar aire fresco porque nos podría dar un resfriado) y
si tenemos puntos negros o granitos, CON MUCHÍSIMO CUIDADO y sin hacernos daño
los sacamos, ya que ahora será más fácil al estar más blandos por el
vapor. También podemos dejarlos, sin
estrujarlos ya que con este vapor la piel se va limpiando y los puntos negros
van desapareciendo por sí solos.
Con este truco
haciéndolo varias veces al mes, veremos cómo los puntos negros desaparecen y
tenemos una piel más luminosa y lucida.
Cuídense!