Hola amig@s!
El aguacate es una fruta y no una hortaliza como muchos pensamos, de
consistencia cremosa con un alto contenido en nutrientes que lo convierte en un
auténtico regalo de la naturaleza.
Posee un alto contenido en vitamina E, gran antioxidante, que fortalece el
sistema inmunológico; el ácido fólico que contiene también lo hace idóneo para
las mujeres embarazadas y para mejorar la memoria y la capacidad mental.
Asimismo, ayuda a bajar el colesterol malo por sus grasas buenas.
Todo esto permite pensar que no solo es bueno comer esta fruta, sino que
por su alto contenido en nutrientes y vitaminas, se puede aprovechar para usos
externos, como en la piel o en el cabello.
Para la piel, estimula la formación de colágeno, ayudando a retrasar el
envejecimiento de la piel. Para el cabello, le da brillo y lustre, reparando el
cabello dañado y seco.
Así, os expongo dos mascarillas, una para el cabello y otra para la piel,
realizadas con aguacate y que a mí, particularmente, me gustan mucho. Las
aplico 1 o 2 veces al mes, aunque se podrían aplicar todas las semanas porque
al contener únicamente productos naturales, no tienen ningún efecto secundario
negativo su uso continuado.
Mascarilla para el pelo:
colocamos en un bol en el que podamos batir, pulpa de aguacate bien maduro junto con un chorrito de aceite de oliva virgen extra y un poquito de miel de abejas de gran calidad. Batimos todo bien, hasta obtener una pasta homogénea.
La aplicamos en el pelo, excepto en las raíces y cuero cabelludo, de forma que quede bien empapado el cabello con la mascarilla. Nos recogemos el pelo y lo cubrimos con una gorro de ducha o una bolsa plástica ( yo utilizo esta última opción porque, a pesar de no ser tan bonita, una vez utilizo la bolsa la tiro, sin tener que limpiarla como si ocurre con el gorro de ducha). Dejamos que actúe durante 45 minutos. Si queremos, podemos darle de vez en cuando un poquito de calor suave con la ayuda del secador de pelo. Tras ello, lavamos bien el pelo como realizamos de costumbre.
Quedará un pelo muy suave, brillante y nutrido.
Mascarilla para la piel:
colocamos en un bol en el que podamos batir, pulpa de
aguacate bien maduro junto con un buen chorrito de limón y una cucharadita de miel. Batimos todo muy bien hasta obtener una pasta homogénea.
La aplicamos en el rostro, respetando los ojos y la boca, de forma suave, haciéndolo con movimientos circulares. Y dejamos actuar entre 20 y 30 minutos. Tras ello, lavaremos bien con agua tibia, acabando de lavar con un poco de agua fría.
El rostro se verá mucho más terso y suave, más luminoso y con un gran aporte de hidratación.
Hasta otra amig@s!
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