Hola a tod@s!
Hoy os traigo
este sencillito truco de cocina, pero que para mí fue un gran descubrimiento:
el cómo cortar una cebolla de trocitos pequeños sin cortarnos ni sufrir en el
intento. Es muy sencillo y se trata de dejarle la parte de las raíces de la
cebolla sin cortar y cortarla como lo hacemos normalmente. La pelamos, dejando
las raíces ahí, como vemos en la foto.
Luego la partimos
a la mitad
La cortamos a lo
largo para luego a lo ancho, como siempre se hace.
Como vemos en la
foto, la parte de la raíz impide que la cebolla se nos desmorone a la hora de
conseguir los cuadraditos pequeños.
Y conseguimos
picarla toda finita y sin cortarnos en el intento, se una manera mucho más
segura y rápida (no tenemos que luego estar repasándola por si hay trozos
grandes).
Al llegar a la parte de la raíz, la desechamos y listo.
Ahora, a ponerlo
en práctica, que es un truquito muy bueno.
Ciao !!!
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